#LifeStyle / #Travel

#CGTrip Una escapada de ensueño a la selva Iryapú

Por Brenda Gil Gorrías

Naturaleza pura y exclusivos hoteles hacen de este apartado enclave un oasis de paz y desconexión. A la vera de la ciudad de Puerto Iguazú, en Misiones, es el nuevo polo de atracción para el turismo que tiene como destino Cataratas. Chicas Guapas conoció sus principales sitios de hospedaje y también hubo tiempo para la aventura.

En Iguazú existe un enclave más que idóneo para unas vacaciones de relax. Un escenario fundido en verde, “el color principal del mundo, y a partir del cual nace su belleza” como decía Pedro Calderón de la Barca, donde se encuentran dos hoteles 5 estrellas que tenés que visitar si tenés una actitud Chica Guapa y un espíritu wanderlust.

Siguiendo la filosofía de respeto al medioambiente, están diseñados para sumergir al huésped lo máximo posible en la naturaleza, lejos de la rutina y el estrés. Además, ofrecen actividades adicionales como traslados a Cataratas. En esta nota te contamos nuestro itinerario.

Selva Iryapú, una reserva de 600 hectáreas, con árboles de más de 400 años como el Palo Rosa. Justo ahí está Loi Suites Iguazú, al que se llega en un pequeño bus que parte del Aeropuerto Internacional de Puerto Iguazú. Son muy pocos los minutos de viaje para encontrarse con este hotel, que abrió sus puertas en 2009. La entrada solo presenta una planta en la que está el lobby bar y la recepción. El contrafrente muestra sus tres niveles: hay que bajar un piso para acceder al restaurante Naipi y dos para llegar a las tres piscinas dispuestas en forma escalonada y rodeadas de grandes árboles nativos, que forman un espejo de agua de unos 1.000 m2. Junto a ellas se encuentra el Tiki Bar que ofrece una carta ligera y descontracturada.

Pero el chapuzón y los tragos deben esperar porque cuando una se hospeda lo primordial es conocer todas las instalaciones y, en este caso, también el terreno. Es que adentrarse y descubrir la selva recorriendo los senderos peatonales autoguiados que se extienden por los alrededores es otra de las propuestas de Loi Suites. Después de conquistar el barro resbaladizo del camino, no hay sensación como la de llegar al hotel y pedir cita en el spa Namasthé para disfrutar de baños de vapor húmedo, ducha escocesa y jacuzzi ozonizado integrados por circuitos de aguas puras y con altos contenidos minerales que, combinados con sesiones de masajes, buscan generar una conexión profunda entre cuerpo y alma.

Tras esos minutos de paz y calma, conciliar el sueño es fácil. Así que es hora de atravesar los puentes colgantes -que además brindan una vista panorámica del ecosistema- para ir a la habitación. Y así termina el primer día.

Para los huéspedes más exigentes

Loi Suites también posee una propuesta de alta gama para quienes quieren disfrutar de una imagen inolvidable de la imponente selva misionera. Se trata de sus exclusivas Vilas Royal -seis unidades apartadas, tipo cabañas-, con ubicación privilegiada, servicio de buttler, amenities y balcones con jacuzzi privado para pasar un momento de relax.

A tres cuadras de Loi Suites, hay otro hotel para cumplir el sueño de alojarse en el corazón de la selva. Se trata de Awasi Iguazú, que comenzó a funcionar en febrero de este año y ya fue elegido como uno de los cien mejores lugares del mundo por Time Magazine.

Artesanías guaraníes como decoración, un regalo sorpresa en la habitación cada noche, un menú de almohadas en el que podés elegir una que favorezca la respiración o una con pluma duvet, son pequeños detalles que hacen a Awasi un lugar único. Sus pocas villas exquisitamente ambientadas, le suman exclusividad: son 14 y todas cuentan con piscina individual y guías privados.

Pero el valor agregado es el servicio personalizado para hacer que el huésped se sienta cómodo y distendido. El bartender Pepe Bastias Villegas explicó que para todo el personal es importante que cada persona que pasa por el hotel se sienta agasajada, y contó una anécdota: “Una señora, que no tomaba alcohol, me retó a que cada día le prepare un trago inspirado en un elemento que ella me trajera. Un día vino con una piedra y armé un cocktail basándome en los sabores de la tierra”.

Esa impecable atención no solo se experimenta en el bar sino también en el restaurante, donde el chef venezolano Aarón Castillo Tellería diseña sus menús teniendo en cuenta gustos y restricciones alimentarias. Algunas de sus especialidades son: ensalada de remolacha y queso azul; falafel; puchero; vacío braseado; papas dauphine y puré de berenjenas; y helado de coco y jengibre, que pudimos degustar sobre el final del segundo día.

Un destino, dos hoteles tan fastuosos como las mismísimas Cataratas.

El lujo de experimentar

La editora de Chicas Guapas se animó a visitar el Parque Nacional Iguazú; subirse a un tren para llegar a la Garganta del Diablo; y caminar por unas pasarelas metálicas hasta un punto panorámico donde pudiera apreciar la inmensidad de este salto. En el mirador tuvo que esperar a encontrar un hueco para sacarse la foto y admirar por unos minutos a una de las Siete Maravillas del Mundo.

Además, recorrió el Circuito Superior para ver desde arriba los saltos Dos Hermanas, Bossetti, Chico, Ramirez y San Martín. Luego, en la Gran Aventura pudo sentir la fuerza del agua en su propio cuerpo cuando el gomón semirrígido ingresó en el cañón del Río Iguazú Inferior, a pocos metros de donde caen los saltos Tres Mosqueteros y San Martín ¡Terminó empapada y llena de adrenalina!

¿Y vos ya conocés Iguazú #ChicaGuapa?